Las últimas investigaciones demuestran la preeminencia visual de nuestros pensamientos. Este aspecto es un elemento crucial si hablamos de ortografía.
Observa:
– vas a escribir una palabra
– tu mente busca la imagen de esa palabra
– la escribes
– hay un ciclo de comprobación (¡ummm!, qué rara ¿será así?)
Si conocemos las herramientas de nuestra mente, podremos usarlas mejor y mejorar nuestra ortografía será MUY FÁCIL